El órgano antimonopolio del Gobierno Mexicano impuso una multa de más de un millón de dólares a la empresa telefónica América Móvil, propietaria de Claro en el país y propiedad del magnate Carlos Slim, por reincidir en una práctica monopólica, de imponerle a las empresas con las que compite en México una tarifa de interconexión (off-net) superior a la que se autoimputa en las llamadas en su propia red (on-net) e incluso superior a los precios finales que cobra a sus propios usuarios, abusando con esto de su poder en el mercado, desplazando indebidamente a sus competidores y con ello afectando el proceso de competencia en los mercados de telefonía fija y móvil, en perjuicio de los consumidores, que al no tener una franca competencia no pueden disfrutar de mejores precios, servicios y disponer de alternativas.
En nuestro país debemos ver como un ejemplo positivo esa multa, pues es hora de que en el mercado de las telecomunicaciones dominicano se haga cumplir de forma absoluta la Ley General de Telecomunicaciones. No se explica cómo nunca hemos tenido ninguna sanción ejemplarizante en un mercado en donde sin lugar a dudas hay muchas necesidades de una verdadera regulación. Nuestro país requiere de que se les facilite a las empresas de telecomunicaciones sus operaciones, que puedan obtener a tiempo sus permisos para colocación de antenas, que no se les cobren nuevos tributos, etc. pero que cumplan con las normas, leyes y resoluciones establecidas que de forma cotidiana se violentan en perjuicio de los usuarios del servicio de telecomunicaciones y del propio país, que paulatinamente ha ido degradándose en materia de telecomunicaciones.
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